El alcalde recibe a los niños refugiados saharauis del Programa Vacaciones en Paz
El alcalde de La Palma, Manuel García Félix, y la concejala de Asuntos Sociales, Antonia García, han recibido en el Ayuntamiento a los niños...
Así se llama el programa de acogida que tiene como objetivo traer desde los Campamentos de Refugiados de Tindouf (Argelia) a niños y niñas para que durante los meses de julio y agosto disfruten de unas cortas vacaciones y alejarlos por unos días de la extrema dureza en la que viven. Este encuentro contó además con la presencia de Luis Cruz, presidente de Federación Provincial de Asociaciones Solidarias con el Sáhara.
Luis Cruz destacó una vez más la solidaridad del pueblo de La Palma y el compromiso y el apoyo que viene demostrando continuamente el Ayuntamiento palmerino hacia el pueblo saharaui. Asimismo agradeció personalmente al alcalde Manuel García Félix y a la concejala Antonia García la especial sensibilidad que están mostrando con este tema.
El alcalde agradeció el esfuerzo de estas familias palmerinas que abren sus casas cada año para recibir a estos niños y librarlos de un verano extremo en los campamentos del Sahara. Destacó la humildad y solidaridad que muestran las familias y recordó que el Ayuntamiento colabora con esta acogida aportando ayuda al coste del viaje de los niños, el acceso a la piscina municipal o a cualquier taller en el que participen, "nosotros colaboramos con ellos en lo que necesiten", ha dicho el alcalde.
En este recibimiento los niños recibieron como regalo una mochila llena de material escolar. En su estancia en La Palma, los niños reciben asistencia médica y cuidados alimenticios para compensar las carencias que sufren. Asimismo, se les plantea actividades culturales y de ocio para que los pequeños conozcan una realidad diferente a la de su país. Las familias de acogida siempre destacan que la experiencia es inolvidable y muy gratificante por ambas partes.
Familias que hacen un llamamiento para que otras familias palmerinas se animen a participar y acojan el próximo verano a alguno de estos niños. A finales de agosto finalizará para estos niños sus vacaciones lejos de la dureza en las condiciones en la que viven. Un momento duro para las familias que lo han acogido durante dos meses, tiempo suficiente para cogerles un cariño muy especial.