El palmerino Fran Cárdenas es hoy el mejor base de la Liga de Baloncesto Adecco Plata 2012-13 después de que se hayan disputado seis jornadas. Así lo demuestran las estadísticas, que sitúan entre los cinco mejores bases de la categoría a cuatro jugadores nacidos en la década de los noventa. Y el número uno es Fran Cárdenas, un hecho que subraya de nuevo la importante labor de cantera y formación que desarrolla La Palma en numerosos deportes.

 

Fran Cárdenas, base de 22 años recién cumplidos, milita actualmente en la Unión Financiera Asturiana Oviedo Baloncesto. Salió de la cantera del Baloncesto Sevilla, que la temporada pasada consiguió el ascenso a la Adecco Oro en Orense. En lo que va temporada ha mejorado todas sus estadísticas de forma muy destacada, doblando o triplicando sus registros. 

 

Cárdenas lidera por ahora el ranking de bases con una magnífica valoración media de 16,8, un excelente registro conseguido gracias a sus 11,2 puntos, 4,4 rebotes, 5,4 asistencias, 1,4 recuperaciones y 4,4 faltas recibidas en prácticamente 30 minutos de juego. Su ratio por partido de balones robados menos balones perdidos más asistencias es la de las mejores, un 3,6.

 

Su entrenador, Guillermo Arenas, considera que su joven base está destacando sobremanera en este arranque liguero. En este sentido, asegura que "Fran es un jugador muy competitivo, lo que le hace estar siempre dispuesto a mejorar". Además, mantiene que está aportando mucha intensidad y ritmo que ayuda al equipo a desarrollar el juego que quiere y que en este inicio de temporada está dando el máximo. Por último, el técnico ha señalado que si sigue en esta línea de trabajo en poco tiempo estará más arriba.

 

El jugador tiene 177 centímetros de estatura y se ha formado en La Palma antes de recalar en las categorías inferiores de Cajasol Sevilla en infantiles. Con el filial sevillano compitió en LEB Plata en las temporadas 2008/2009 y 2009/2010, pasando entonces a Ourense, en Adecco Oro. La temporada pasada permaneció en el club gallego, en Adecco Plata, con el que logró el ascenso a Oro. Su promedio del año fue de 18 minutos por partido, haciendo 4,8 puntos, 1,7 rebotes y 1,6 asistencias de media.