Fruto del acuerdo de colaboración entre el Ayuntamiento de La Palma del Condado, la Dirección General de Tráfico (DGT) y el Ministerio del Interior se van a establecer controles en los próximos tres meses en aquellas zonas de la localidad donde existe una circulación más rápida y que pueden ser susceptibles de mayor siniestralidad. Para cumplir con este objetivo, la Jefatura de la Policía Local ha logrado la cesión temporal de un vehículo de la DGT, equipado con un un etilómetro de precisión para medir la tasa de alcohol en aire espirado, que será utilizado de manera aleatoria en caso de accidente.

La vigilancia se efectuará a cualquier hora del día y en tramos urbanos donde existe mayor riesgo de accidente, bien por la proximidad de pasos para peatones, colegios, parques, vías sin semáforos o badenes, cruces peligrosos o calles proclives a ser usadas para acelerar. También losaccesos al municipio serán algunos de los puntos donde se centre esta campaña, ya que cuando se accede desde la autopista o la circunvalación se da la circunstancia de que la incorporación a las vías urbanas suele llevar una inercia de velocidad muy superior a la permitida en el casco urbano, por lo que se tarda demasiado tiempo en reaccionar, lo que supone un riesgo para los peatones y para otros conductores.

El vehículo está debidamente identificado con las siglas DGT y el nombre completo de la Dirección General de Tráfico, "por lo que no estamos hablando de un coche camuflado al uso, ni de un dispositivo que esté escondido para que los conductores no lo vean, es perfectamente visible", ha manifestado José Manuel Benjumea, oficial jefe de la Policía Local. La unidad estará operada por agentes del cuerpo municipal.

La Jefatura de Policía ha destacado que la campaña está orientada a la seguridad y la concienciación de los conductores y no a su sanción económica y que tiene como única meta garantizar la seguridad de los viandantes ante los posibles excesos de velocidad o consumo de alcohol así como prevenir y reducir el número de accidentes en el casco urbano.

Las infracciones por exceso de velocidad en el ámbito urbano tienen un componente especial ya que los conductores comparten las vías públicas con peatones, bicicletas y transporte escolar, lo que hace especialmente complejos aspectos como el de la seguridad en las calles, por lo que se intenta inculcar a los ciudadanos que deben tener en cuenta dos aspectos básicos: no rebasar nunca los límites máximos para cada vía y adecuar la velocidad de los vehículos a las circunstancias del tráfico, aunque no se rebasen los límites.

Otra de las finalidades de esta campaña es llevar a cabo diversos estudios sobre la conducción en las vías urbanas, denunciando a aquellos conductores que excedan claramente los límites establecidos. De hecho, la Jefatura de Policía ha alertado de los riesgos que entraña circular a una velocidad excesiva o inadecuada en función del tipo vía por la que se transita, "que es la principal causa de los accidentes de tráfico en la localidad", ha asegurado José Manuel Benjumea.

Además, contar con un vehículo de la DGT reporta a la Policía Local nuevas posibilidades en cuanto a la organización de los servicios para la prevención de la delincuencia y desarrollar sistemas de planificación con medidas preventivas adecuadas a las diferentes zonas del municipio.